Desde que encontré El ojo de Dios de Curtis Garland, en un kiosco de revistas de Mar del Plata, me obsesioné con los bolsilibros y sus historias. Tengo varios, y si bien no soy un coleccionista, no me resisto cuando encuentro alguno.
En el caso de Una mujer llamada "Eterna", también de Curtis Garland, hallé una mezcla de temas bastante interesante: esclavitud, gladiadores del espacio, reptilianos, hombres bestia, y vampiros presos en una nave-ataúd flotando sola en medio del espacio.
Como en toda Ópera Espacial, la acción no se detiene. Luego de trabajar gran parte de su vida, Karr Vulcan espera regresar con todo su dinero a su planeta natal, donde lo espera su prometida. Pero hace una parada en un bar, y allí es donde, luego de sucumbir a la tentación de una meretriz, es entregado por ésta como un esclavo. Jurando venganza, Karr es arrastrado a las minas de cristal de Zoltek, el amarillo, para servirle hasta morir. Sus aliados, el reptiliano Skrog del planeta Vishna, y el zoónido Ingar, del planeta Árbox. Cuando Zoltek ofrece la libertad a quienes sobrevivan en un circo de gladiadores a los monstruos de los planetas pantanosos del Núcleo Quince, los tres camaradas ven su oportunidad.
La historia es divertida. Luego de raptar a Alura, la esposa de Zoltek para escapar con los esclavos de Zeus (el planeta donde enfrentaban a los monstruos), Karr descubre que estaba controlada mentalmente por el enemigo. Huyendo de él se encuentran con una nave abandonada que inspeccionan y encuentran llena de inmortales en animación suspendida. La reina de esta comunidad, Eterna, los ayuda al eliminar, con los poderes psíquicos de su raza, a sus perseguidores.
Alura, la ex de Zoltek, brinda los toques cómicos al mostrarse celosa de Eterna, y a su vez, desesperanzada porque Karr tiene una prometida en su planeta natal. Pero los celos revelan algo más que el enojo, ya que es la primera en sospechar cuando los llevan hacia el hogar de sus nuevos aliados, Inmortalia, en apariencia un paraíso.
El final, es algo precipitado, pero en los bolsilibros la cantidad de hojas manda. Luego de eliminar a sus últimos enemigos, Karr recibe noticias de su prometida, quien para alegría de Alura, ha cancelado el compromiso después de tantos años de estar esperando a Karr.
¡¡Por lo visto salió con dos tapas!! Yo tengo la primera.
Sombras del Bosque
martes, 11 de febrero de 2014
domingo, 9 de febrero de 2014
El origen de los Guardianes
Sinopsis:
'El origen
de los guardianes' cuenta la historia de Santa Claus, el Conejo de Pascua, el
Hada de los Dientes y el Hombre de Arena. Los guardianes de los niños, que al
verse amenazados por los nuevos poderes del hombre de la bolsa, reclutan a Jack
Frost, el espíritu de la nieve y la escarcha, para unir sus fuerzas y proteger
los deseos, las creencias y la imaginación de los niños.
¿Por qué está buena?
- Papá Noel es una especie de Oso-Vikingo-Guerrero.
- El Conejo de Pascua tiene un búmerang, es medio mala onda y sabe pelear.
- Se trasladan de un punto a otro del planeta vía portales.
- Jack Frost, que es el protagonista, es medio looser, pero es el más humano de los personajes.
- El hombre de arena parece un duende dulce y flashero, pero cuando se enoja se vuelve groso.
- Además del Hada de los Dientes, hace un cameo el Ratón Pérez.
- Hay buenas peleas, acción, nos reconcilia con nuestra infancia, y nos cuenta el origen de los mitos infantiles.
Nota:
- La
Película está basada en la serie de libros de William Joyce, 'The Guardians of
Childhood' (Los Guardianes de la Infancia).
martes, 29 de octubre de 2013
Por qué no veo el Juego de Ender, de Orson Scott Card
¿Por qué no veo el Juego de Ender, de Orson Scott Card ni compro sus libros? Podría ser más tolerante, y disfrutar de las historias de este autor, sin importarme que haya hecho campaña en contra de mis derechos en los EEUU, con difusión internacional. Pero no. Porque es muy feo consumir algo de alguien que discrimina, usando como argumento que las relaciones homosexuales no son naturales (las define como contra-evolucionarias y parafílicas), y que llevan al camino de la destrucción. Alguien que fue uno de los directores de National Organization for Marriage, que hizo campaña en contra del Matrimonio Igualitario, y que en un ensayo en 1990 escribió que las leyes que prohíben el "comportamiento" homosexual deben "ser usadas cuando sea necesario para enviar un mensaje claro de que aquellos que vergonzosamente violan la regulación social del comportamiento sexual no pueden mantenerse como ciudadanos aceptables e iguales dentro de esa sociedad", para después decir en 2013 que ya no busca criminalizar la homosexualidad (justo a tiempo para la promoción de la película de sus libros).
Porque una cosa es ser tolerante, y otra dejar que se caguen en tus derechos. Porque hoy son mis derecho los que se vulneran, pero en otro momento fueron o pueden ser los tuyos, por tu color de piel, tu ascendencia, el color de tu pelo, tu peso, tu nacionalidad, tu clase social o lo que sea.
Te cuento, pos si vivís en un termo, que la homosexualidad existe en la naturaleza: todos los animales muestran tendencias homosexuales. Ah, y usar ropa o viajar en colectivo, escribir, hacer cuentas, pintar, patinar, montar obras de teatro, redactar leyes y cortarse el pelo tampoco es natural, pero lo hacemos todos los días.
Piénsenlo bien. Buenas tardes.
Porque una cosa es ser tolerante, y otra dejar que se caguen en tus derechos. Porque hoy son mis derecho los que se vulneran, pero en otro momento fueron o pueden ser los tuyos, por tu color de piel, tu ascendencia, el color de tu pelo, tu peso, tu nacionalidad, tu clase social o lo que sea.
Te cuento, pos si vivís en un termo, que la homosexualidad existe en la naturaleza: todos los animales muestran tendencias homosexuales. Ah, y usar ropa o viajar en colectivo, escribir, hacer cuentas, pintar, patinar, montar obras de teatro, redactar leyes y cortarse el pelo tampoco es natural, pero lo hacemos todos los días.
Piénsenlo bien. Buenas tardes.
Etiquetas:
"matrimonio igualitario",
DDHH,
LGBT,
LGBTIQ
viernes, 21 de diciembre de 2012
El origen de Santa Claus
La figura de Papá Noel estaría inspirada en la vida del obispo de Mira - en la actual Turquía- conocido hoy como San Nicolás, cuya inmensa popularidad por su bondad y generosidad con los pobres lo estableció como mito de la navidad.
Este obispo cristiano de Mira era de origen griego y se llamaba Nicolás. Vivió en el siglo IV en Anatolia, en los valles de Licia. Era una de las personas más veneradas por los cristianos de la Edad Media, del que aún hoy se conservan sus reliquias en la basílica de San Nicolás, en Bari, Italia.
La leyenda cuenta que San Nicolás, proveniente de una familia adinerada, decidió encauzar su vida en la religión cuando fallecieron sus padres, y centrándose en los más pequeños repartió su fortuna personal.
Este obispo cristiano de Mira era de origen griego y se llamaba Nicolás. Vivió en el siglo IV en Anatolia, en los valles de Licia. Era una de las personas más veneradas por los cristianos de la Edad Media, del que aún hoy se conservan sus reliquias en la basílica de San Nicolás, en Bari, Italia.
La leyenda cuenta que San Nicolás, proveniente de una familia adinerada, decidió encauzar su vida en la religión cuando fallecieron sus padres, y centrándose en los más pequeños repartió su fortuna personal.
La figura de San Nicolás arraigó en Holanda en el siglo XIII y era representado con barba blanca, vestiduras eclesiásticas, un saco de regalos para los niños y montado en un burro. En 1624 los emigrantes holandeses fundaron Nueva Holanda en el continente americano, que se convertiría en Nueva York al pasar a dominio inglés. Trajeron con ellos el personaje navideño de San Nicolás, al que llamaban Sinterklaas. Alrededor del 1800, los ingleses deformaron Sinterklaas a Santa Claus por la pronunciación anglosajona, bautizándolo de esa manera en el continente americano, donde se volvería muy popular.
Algunas de las características clásicas de Santa Claus aparecerían en el poema anónimo de principios del siglo 19 “Una Visita de San Nicolás”, también conocido como “La noche antes de navidad”. Allí lo describen como un elfo viejo, regordete y feliz de panza redonda.
Posteriormente, hacia 1863, adquirió la actual fisonomía de gordo barbudo bonachón con la que más se le conoce. Esto fue gracias al dibujante alemán Thomas Nast, quien diseñó este personaje para sus tiras navideñas en el diario Harper's Weekly.
Fuente: wikipedia
¿Por qué decoramos un árbol en navidad?
En la Alemania precristiana se realizaban dos ritos: el
primero al Dios Odín, padre de los dioses de la mitología escandinava. La
costumbre consistía en un grupo de guerreros reunido en torno al roble sagrado
de Odín. A manera de tributo, ofrendaban las vidas de los prisioneros de
guerra.
En Inglaterra el árbol de navidad llegó en 1846 gracias al matrimonio del Príncipe Alberto (alemán de nacimiento) con la Reina Victoria. Como el árbol de navidad ya era una costumbre arraigada en Alemania, el Príncipe Alberto pidió que se colocara un inmenso árbol de navidad en el castillo de Windsor y fue tal su aceptación que pronto se propagó a la clase media y luego a las clases trabajadoras.
El segundo rito estaba dedicado al Dios Thor, hijo de Odín,
considerado como el más fuerte de todos los Dioses nórdicos. En su nombre
realizaban una ceremonia con unos tallos de doce hojas de una planta llamada
palma. Cada una de las hojas representaba un mes del año. Al finalizar la
ceremonia, encendían la punta de cada hoja y apilaban las palmas en forma de
pirámide formando una hoguera en su honor.
Estas ceremonias cambiaron en el siglo VII, con la llegada a
Alemania del monje San Bonifacio. Para detener los sacrificios humanos en el
roble dedicado a Odín, San Bonifacio usó un abeto para evangelizarlos.
Aprovechando su forma triangular, logró transmitirles el concepto de la
santísima trinidad y consiguió que los
nativos se convirtieran a la religión cristiana, venerando este abeto como el
árbol de Dios.
Con el correr de los siglos, la costumbre de venerar al
abeto se fue transformando y cruzando fronteras, uniéndose con otras
tradiciones como las celtas.
Los antiguos celtas creían que el árbol representaba un
poder, y que ese poder los protegía y ayudaba. Los bosques eran sus templos. Tenían
un árbol sagrado, la encina, del que los sacerdotes druidas recogían el
muérdago siguiendo un ritual.
La unión de las diferentes tradiciones instaló lo que hoy
conocemos en occidente como el Árbol de Navidad.
Se afirma que fue Martín Lutero, inspirador de la Reforma
Protestante, quien inventó el árbol de navidad en el siglo XVI. Según la
leyenda, una noche en la que Lutero regresaba a casa, observó que la luz de las
estrellas centelleaba en las ramas de los árboles cubiertos de nieve. Esto le
hizo recordar la estrella de Belén que guió a los reyes magos la noche en que nació Jesús e inspirado por
esta imagen taló un árbol, lo llevó a su casa y lo decoró con velas, nueces y
manzanas simbolizando los dones que los hombres recibieron con el nacimiento de
Jesucristo.
Al correr de los años, esta idea se esparció por algunas
provincias de Alemania y la gente ya empezaba a tener la costumbre de colocar
un abeto en sus hogares, y decorarlo con diversas creaciones.
En Inglaterra el árbol de navidad llegó en 1846 gracias al matrimonio del Príncipe Alberto (alemán de nacimiento) con la Reina Victoria. Como el árbol de navidad ya era una costumbre arraigada en Alemania, el Príncipe Alberto pidió que se colocara un inmenso árbol de navidad en el castillo de Windsor y fue tal su aceptación que pronto se propagó a la clase media y luego a las clases trabajadoras.
El Origen de la Navidad
La navidad comienza a ser
celebrada como en nacimiento de cristo por los primeros cristianos entre los años
320-353.
Se origina en la fusión de
varias celebraciones (celtas, griegas, germanas y de los indios védicos) que se
hacían entre diciembre y enero para celebrar en el norte del planeta el
solsticio de invierno, el momento del año en que los días empezaban a ser más
largos, luminosos y cálidos.
Este periodo dura doce
noches, desde el 25 de diciembre hasta el 6 de enero. En esas fechas, el sol
parece estar a punto de extinguirse, y según la tradición, los reinos de los
vivos y los muertos entran en comunicación. Los antepasados de los europeos lo
celebraban como anuncio del próximo retorno del Sol y del renacimiento de la vida
a pesar del frío invernal.
Aunque se cree que
Jesucristo nació en la primavera, en el año 350 el Papa Julio I fijó la fecha
del 25 de diciembre para hacerla coincidir con los rituales de otras
tradiciones. En especial, la fiesta pagana del nacimiento del sol. Y así
favorecer la conversión de los romanos al cristianismo.
NAVIDAD ROMANA
Los romanos tenían sus
celebraciones los días del 17 al 23 de Diciembre, en las que la cocina y la
bebida tenían protagonismo. Eran los Saturnales, en honor al antiguo dios de la
Agricultura, Saturno. Culminaban el 25 de diciembre con el nacimiento del dios
Sol, Mitra, de gran popularidad en la roma de esa época.
En estas fechas los romanos posponían todos los negocios y guerras, hacían intercambio de regalos, y liberaban temporalmente a sus esclavos.
Mitra
Saturnales
En estas fechas los romanos posponían todos los negocios y guerras, hacían intercambio de regalos, y liberaban temporalmente a sus esclavos.
Esta empezó a celebrarse
como una fiesta cristiana a partir de la época de Constantino, por el año 300,
cuando el emperador cesa con su prohibición por la popularidad que había
alcanzado el ritual del renacimiento del sol entre los romanos cristianos.
Cuando la Iglesia decide
absorber esa fiesta en el siglo IV, le da un sentido cristiano, identificando
el nacimiento del sol con el nacimiento de Cristo, el Nuevo Sol y luz de la
humanidad.
En realidad, la iglesia
primitiva nunca pudo fijar la fecha exacta del nacimiento de Jesús, teniendo
amplios debates sobre este tema en el siglo II. Dicen que en el Oriente antiguo
no se celebraban los cumpleaños, por eso no habría registros del nacimiento del
Jesús histórico.
Para algunos autores
ocultistas Albert Churchward y Joseph Welles, existen coincidencias entre el
Jesús representado por los cristianos y los dioses anteriores, como Horus, de
Egipto; Mitra, de Persia, y Krishna, de la India: todos nacen de una madre
virgen, cerca del 25 de diciembre, realizaron milagros, tuvieron doce
discípulos, resucitaron y subieron al cielo.
NAVIDAD CELTA
En la cultura celta, la festividad del solsticio de invierno recibía el nombre de Yule. Se celebraba con bailes y fiestas, se sacrificaba un cerdo en honor de Frey, dios del brillo del sol, el amor, la fertilidad, el clima y la lluvia. Representaba el nacimiento del dios sol después de su muerte en el SOWIN, lo que conocemos hoy como Halloween.
Tronco de Yule por Wicca Tarot
En esta celebración era tradicional quemar un tronco, llamado el tronco de Yule, que ardía lentamente durante toda la festividad, en honor del nacimiento del nuevo sol.
De los celtas provienen
tradiciones como los troncos de chocolate que se comen en Navidad, decorar las
viviendas con muérdago, dejar velas encendidas y colgar figuras de madera en la
puerta.
Altar de Yule por Rean Deanna
Nosotros festejamos la
navidad durante el solsticio de invierno, porque mantenemos la tradición
heredada de Europa, pero en realidad vivimos el solsticio de verano, ya que en
el Sur el 21 de diciembre es el día más largo y la noche más corta del año, y a
partir de esa fecha, los días comienzan a volverse más cortos, oscuros y fríos
por al acercarse el otoño y el invierno.
martes, 20 de noviembre de 2012
Halloween/Samhain: Cuando los mundos están más cerca
Desde chico siento una fuerte atracción hacia toda la estética relacionada con las películas de terror: murciélagos, telarañas, fantasmas, calderos humeantes, libros viejos, y por supuesto, casas antiguas abandonadas. No es raro entonces que cada vez que veía el Halloween en una serie o peli americana, me gustara mucho. Invasión cultural aparte, era imposible para mí ver los esqueletos, las calabazas iluminadas de expresión siniestra, y la idea de salir disfrazado a la calle, y no pensar en que era súper interesante y genial. Además de la percepción del contacto con lo que está más allá, lo ancestral y la conciencia colectiva, pudiéndose vivenciar a través del juego.
Lo más extraño de todo esto es que siempre sentí una fuerte conexión con la cultura celta, y al momento de investigar, descubrí que ambas cosas estaban relacionadas.
Historia del Halloween
El origen del halloween está en la cultura celta, un
conjunto de pueblos que vivían en lo que hoy se conoce como las islas
británicas, Francia, España, Galicia, Portugal y otras zonas de europa entre el
siglo XX antes de cristo y el año 50 AC.
La festividad fue adoptada por los romanos cuando llegaron a
la región, y adaptada al cristianismo como El día de todos los Santos en el
siglo VII aproximadamente. Es arraigada en los Estados Unidos gracias a los
inmigrantes escoceses que llegaron a partir de 1840.
¿Cuál era el significado original de la celebración?
Lo que hoy conocemos por Halloween era, para los celtas, el Samhain.
Se pronuncia Sowin.
Samhain significa el fin del verano. Se celebraba en la
noche del 31 de octubre al 1º de noviembre, que era el final de la temporada de
cosechas para los celtas, y también el comienzo de un nuevo año. Era su forma
de simbolizar el solsticio de invierno: el fin de la estación luminosa,
calurosa, con abundancia de cosecha, y el comienzo de la estación invernal,
oscura, asociada con el refugio y la escasez. El Samhain era el momento de
hacer un balance de la cosecha recogida y planificar su consumo durante el
resto del año.
Los celtas creían que durante el Samhain se tendía un puente
entre nuestro mundo y el Otro Mundo. Esto permitía el libre transitar de los
espíritus, tanto buenos como malos. También era la oportunidad de recibir y
honrar a los ancestros y parientes fallecidos.
La costumbre de disfrazarse, que ha sobrevivido en el
Halloween actual, se debe a que en el Shamhain los celtas se disfrazaban de
seres del Otro Mundo para engañar y asustar a los espíritus, y así salvarse de
aquellos que eran malévolos. Los celtas también daban ofrendas como vino y
comida a los espíritus. Costumbre que ha transformado hoy en la ofrenda de dulces
a los niños.
Para conmemorar el Samhain, se apagaban las hogueras de todo el pueblo. Los sacerdotes celtas,
llamados druidas, construían grandes fogatas, que se consideraban sagradas. Las
personas quemaban cosechas y animales en sacrificio a los dioses celtas.
Al final de la celebración, cada persona tomaba algo de
fuego de la gran fogata, y encendía una lumbre en su hogar, que la protegería
del invierno y los malos espíritus.
Hoy, existen versiones contemporáneas del paganismo y las
religiones celtas que celebran el Samhain.
Uno suele hacer balances en Navidad y Año Nuevo, pero Halloween/Samhain puede ser una alternativa para los que nos gusta la cultura celta. Cualquier fecha es buena para hacer las paces con nuestros ancestros, dejar lo malo atrás y empezar una nueva etapa, más allá de los símbolos que utilicemos.
Espero lo hayan pasado bien el Samhain pasado, y pueden ir preparándose para el próximo.
Etiquetas:
curiosidades,
halloween,
mitos,
Nueva Tierra,
terror
Suscribirse a:
Entradas (Atom)