Mdp

El jueves, apenas llegué, almorcé/merendé (eran como las 16) en Tío Cursio, un café en una terraza con vista al mar. :)
Fui a la feria artesanal, y pasé por el Torreón del Monje. Una construcción medieval frente al mar sumamente atractiva.
Lo que más me gusta de Mar del Plata es el Paseo J. de Galíndez. Caminar al lado del mar, desde esa especie de balcón gigante, y escuchar y ver su golpe espumoso contra las piedas enormes, es, simplemente, hermoso.
Hice las cosas típicas: caminé por la peatonal San Martín, y por Güemes. Conocí la Capilla Stella Maris (a la que nunca había entrado en mis anteriores visitas), y quedé fascinado por la imagen de la Virgen del Mar. Deseaba tanto sacar una foto... pero no lo hice, por respeto. :P
El viernes fui a Miramar. Estuve en la peatonal, que está prácticamente vacía en invierno, y después me senté en la arena viendo el mar. Fui al vivero dunícola Florentino Ameghino, donde almorcé una hamburguesa con papas fritas (en el sector comercial) :). Conocí el famoso bosque energético. Es un círculo de pinos, donde supuestamente hay manifestaciones de energía. La gente clava una rama en el piso, de forma vertical, y luego toma otra rama y la coloca horizontalmente sobre aquélla. Sorprendentemente, las ramas mantienen el equilibrio.
Hice una prueba, colocando una ramita, horizontalmente, sobre otra rama, de un árbol, y se sostuvo (!).


Probé acercando mis manos, y realmente sentí una fuerte vibración. Después, abracé un árbol, y me sentí mejor. :D
Cuando volví a MdP, salí como móvil para "vuelta y media", hablando del turismo (que estaba a pleno), y los destrozos en el monumento a Olmedo y a San Martín.
A la noche, fui un rato al casino.
El sábado paseé por el centro. Me hizo acordar a cuando fui con mis viejos (1994, aprox.), especialmente al pasar por los kioscos de revistas (de chico iba puesto por puesto buscando historietas :P). En uno que está frente al bingo encontré novelitas de bolsillo viejas, amarillentas, baratas y ochentosas, de ciencia ficción (se me cae la baba). Compré las dos que encontré. También había otras de varios géneros (western, policales, aventuras, etc.), pero me llamaron mucho más la atención las de Corín Tellado, novelitas románticas que leían mi tía y mi mamá, hace más de cuarenta años. Por supuesto, me compré las novelitas de sci-fi y le compré una de Corín Tellado a mi vieja. :D
Como llovía, fui al Shopping-tienda "los Gallegos".
A la noche, salí.
Se hizo domingo, y a las 16 me tenía que ir. Así que fui a almorzar, visité el hotel Torres de Manantiales (donde fui con mis viejos de chico), caminé por el centro, y tomé un té, despidiéndome de Mar del Plata y su mar, hasta la próxima vez.

P.D.: Cuando se sube por avenida Colón, de noche, las luces de la calle forman la capucha y la capa de Batman. :D