domingo, 17 de febrero de 2008

mmmm chocolate

Se usa para seducir a una novia, como consuelo en momentos de angustia, y como compañero en momentos de soledad. En invierno, una buena taza de chocolate caliente nos da valor para enfrentar al frío.
¡Y cómo nos tienta su aroma cuando estamos a dieta!
Lo podemos encontrar de mil formas: en bombones, en barritas, rallado, derretido, en helado, en tortas, en caramelos. Amargo, dulce, con maní. ¿Ya se les hace agua a la boca?
Para los aztecas, el chocolate era un lujo, una especie que bebían los guerreros y la nobleza, usada en ritos y ceremonias. También usaban las semillas de cacao como moneda.
La gran fiesta del cacao, dedicada al dios de la lluvia, se celebraba en los cacaoteros. En ella se tomaban distintas bebidas embriagadoras, hechas de cacao.
Sobre el carácter afrodisíaco del chocolate, se creía que tenía poderes y que daba fuerza y vigor a quienes lo bebían.
Ya en España, la bebida fue endulzada, y mantenida en secreto por casi 100 años. Una vez salido a la luz, el chocolate reinaría por toda Europa. En 1657 se abrió en Inglaterra la primera chocolatería y para 1930 se vendían en Estados Unidos cerca de 40.000 clases diferentes de chocolate.
Sin embargo, recién en 1824 John Cadbury, creador de una de las más famosas marcas de chocolate, abría su pequeña fábrica en Birmingham, Reino Unido. Poco a poco el negocio fue creciendo, hasta volverse la exitosa empresa Cadbury.
Este hombre no sólo veía fines comerciales en el chocolate. Para él, era un modo de eliminar el consumo de alcohol en la población. Reemplazando las bebidas alcohólicas por el chocolate, Cadbury esperaba terminar con la pobreza y los problemas de la sociedad. Su tarea no terminó ahí: también lideró campañas contra la explotación infantil, el trabajo esclavo y el maltrato a los animales.
Si bien el chocolate no solucionó todos los problemas de la sociedad, nos trajo su dulzura, para reconfortarnos en momentos tristes y disfrutarlo en cada celebración.
Y vale recordar a Cadbury, no sólo como quien llenó de dulzura a tanta gente, sino como un hombre que se dedicó a aliviar el dolor de otros a través del trabajo comunitario.

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